¿Cómo endulzar las aceitunas con sosa y agua?

Gracias a unos sencillos trucos, pueden convertirse fácilmente las aceitunas en algo delicioso. En esta entrada del blog, hablaremos sobre cómo endulzar las aceitunas con sosa, y de cómo se puede utilizar para crear platos exquisitos.

Así que si te interesa probar esta técnica por ti mismo/a, ¡estate atento/a!

Las aceitunas son uno de los ingredientes más apreciados en diversos platos de la cocina mediterránea. Ya sea en una ensalada caprese al estilo italiano, ensaladilla de patatas, en una ensalada griega más tradicional o en un tapenade. Las aceitunas tienen un sabor único y sabroso.

Sin embargo, las aceitunas tienen un amargor inherente que puede resultar desagradable para algunas personas. Si buscas una forma de endulzar tus aceitunas sin sacrificar su sabor, estás de suerte. Una forma tradicional de endulzarlas es con sosa cáustica.

¿Qué es la sosa cáustica?

La sosa cáustica es una base o sustancia química muy corrosiva que se utiliza en varias industrias, incluida la alimentaria. Se conoce por su nombre científico, hidróxido de sodio, o como lejía o lejía de sosa.

En las aplicaciones alimentarias, la sosa cáustica se suele utilizar como agente leudante, como en la levadura en polvo, o para mejorar las texturas y hacer los alimentos más apetecibles.

Para endulzar las aceitunas, la sosa cáustica suele utilizarse diluida en agua, lo que ayuda a reducir el amargor de las aceitunas.

¿Cuánta sosa cáustica por kilo de aceituna es necesaria?

La cantidad de sosa cáustica por kilo de aceituna varía según el tipo de aceituna y el proceso de curado que se utilice. En general, se recomienda utilizar entre 10 y 15 gramos de sosa cáustica disuelta en un litro de agua por cada kilo de aceitunas.

Este método ayuda a eliminar el amargor de las aceitunas, ablandando su piel sin afectar su sabor. Es fundamental controlar bien el tiempo de inmersión para evitar que las aceitunas pierdan sus propiedades naturales. Asegúrate siempre de seguir las medidas exactas y enjuagar bien después del tratamiento.

Preparar aceitunas con hidróxido de sodio

Utilizar sosa cáustica para endulzar las aceitunas es relativamente fácil. Sin embargo, antes de empezar, es importante tener en cuenta la seguridad. La sosa cáustica es un material peligroso y debe manipularse en consecuencia.

Conocer la proporción de sosa cáustica para aceitunas.

Asegúrate de utilizar siempre guantes de goma y gafas protectoras cuando manipules productos químicos como la sosa cáustica.

Cuando prepares la solución de sosa cáustica, empieza por verter agua fría en un recipiente que pueda soportar el hidróxido de sodio. Debes esperar a que el agua baje a temperatura ambiente ya que la reacción química provoca calor.

Por cada kilo de aceitunas añade 15 gramos de sosa cáustica si son aceitunas negras y 30 gramos si son verdes.

El agua tiene que cubrir completamente las aceitunas. Y se debe mantener en el recipiente entre 6 y 8 horas, dependerá del tamaño y del tipo de aceituna.

Debemos sacar de vez en cuando alguna y hacer un corte para comprobar si la sosa ha conseguido llegar al hueso.

Una vez transcurrido el tiempo óptimo de curado, enjuaga las aceitunas en agua fría, retira y desecha la solución de sosa cáustica. Deberás consultar cómo reciclar este tipo de soluciones para no dañar el medioambiente.

Hacer al menos dos cambios de agua con sal con algo más de 1 hora de duración entre uno y otro para eliminar toda la solución de la sosa cáustica.

¿Por qué y cómo se utiliza la sosa en este proceso para endulzar las aceitunas?

El hidróxido sódico o hidrato de sodio es un producto químico ampliamente utilizado en la cocina para conservar las aceitunas. Las aceitunas recién cosechadas tienen un sabor amargo y una consistencia que las hace indigestas.

Para poder consumirlas, es necesario someterlas a un proceso de conservación, que puede realizarse mediante varios baños en agua y sal durante varios días, o utilizando el sosa cáustica, lo que reduce el tiempo de procesamiento a solo un día.

¿Cómo conservar las aceitunas una vez endulzadas?

Hay varias formas de servir las aceitunas. Se puede esperar un día dejándolas siempre sumergidas en agua con sal y luego servirlas tal cual. Conservarán más el sabor de la aceituna.

O las podemos mezclar también con diferentes hiervas, frutas y especias. Hay quienes incluyen en el envase limón o naranja, clavo, hojas de laurel, tomillo, hinojo. Otras personas utilizan romero y otras hierbas aromáticas, dependiendo el sabor que quieran conseguir.

Otros métodos para endulzar

Aunque la sosa cáustica es una forma fácil y eficaz de endulzar las aceitunas, muchos prefieren un método más natural. Uno de ellos consiste en utilizar sólo agua.

Para endulzar las aceitunas sólo con agua, añádelas a un recipiente grande y cúbrelas con agua fría. Hay que cambiar el agua todos los días para conservar el sabor y la textura de las aceitunas.

El proceso de curación puede durar hasta 4 semanas antes de que las aceitunas estén dulces y listas para ser disfrutadas.

¿Cómo conservar luego las aceitunas?

Método al punto de huevo.

En este proceso, para saber cuanta sal se necesita se suele utilizar como medida un huevo crudo. La forma de hacerlo es:

• Utilizar un recipiente con agua y añadir sal. Remover hasta que se diluya.
• Introducir el huevo crudo y observar si flota o se hunde.
• Añadir sal y disolverla en el agua hasta que el huevo acabe flotando.

Por supuesto debe ser un huevo que esté en buenas condiciones para su consumo.

Utilizar sosa cáustica para endulzar las aceitunas

Endulzar las aceitunas con sosa cáustica es un método relativamente simple que requiere un esfuerzo mínimo y produce resultados sabrosos. Sin embargo, al manipular la sosa cáustica, es importante tomar todas las medidas de seguridad para garantizar un resultado seguro y satisfactorio. Si se utiliza correctamente, la sosa cáustica es una forma estupenda de endulzar las aceitunas sin sacrificar mucho el sabor.

¿Cómo reciclar la sosa cáustica?

Por último, recuerda que aunque gran parte del poder corrosivo de la sosa cáustica se pierde al diluirla en el agua. Y otra parte desaparece al realizar el endulzado de las aceitunas. Aún puede ser peligroso manejar ese agua con sosa, por lo que deberás buscar la forma de reciclarla o diluirla mucho más para evitar que provoque problemas en la superficie de tus muebles, suelos o al deshacerte de ella.

También se utiliza para limpiar objetos y desatascar, pero, recuerda, manéjala siempre con mucho cuidado.