Entrevista a Miguel Gil, fisioterapeuta de Coín que ha participado en los Juegos Paralímpicos

Aquí tenéis un lujo de entrevista que Miguel Gil se ha prestado a compartir con todos nosotros. Espero que la disfrutéis igual que yo al hacérsela.

Miguel, has desarrollado una carrera impresionante en fisioterapia, abarcando desde el ejercicio terapéutico hasta el manejo del dolor complejo. ¿Qué te llevó a especializarte en estas áreas tan diversas y cómo se complementan entre sí en tu práctica diaria?

Cuando comencé a estudiar fisioterapia, me di cuenta muy pronto que el principal problema de las personas es el dolor. Incluso aún más diría que el miedo al dolor es una de las mayores afectaciones que soporta la población en general. Eso implica miedo al movimiento. Porque es fácil pensar que si algo duele, tal vez moverlo pueda ser peor.

Muy pocos son los pacientes que acuden a consulta porque les faltan algunos grados de movimiento, pero prácticamente la mayoría acude porque tienen dolor y han dejado de hacer cosas. Así que con una profesión tan amplia en cuanto a las posibilidades terapéuticas que ofrece, me resultaba inevitable profundizar en temas como el abordaje del dolor, el movimiento, o la postura.

Hablando de tu papel como docente en la Universidad de Málaga ¿es una parte importante de tu carrera? ¿Cómo logras equilibrar la enseñanza con tu práctica clínica, y qué aspectos consideras más importantes al formar a la próxima generación de fisioterapeutas?

Como tutor externo de prácticas clínicas de Fisioterapia, tanto de la Universidad de Málaga como de la de Osuna, considero que la experiencia adquirida durante más de 23 años tiene un gran valor para las nuevas promociones de fisioterapeutas. Cada año vienen más preparados y con más conocimiento, y cuando suman a todo esto la experiencia clínica de profesionales que además de tratar a diario a pacientes, tienen vocación docente, el crecimiento de estos futuros profesionales es aún mayor.

Además, estar en contacto constante con la comunidad universitaria, me obliga a estar lo más actualizado posible tanto en técnicas, como en tecnología y conceptos. Así me mantengo con el espíritu constante de aprendizaje.

La neurodinamia es una técnica avanzada en fisioterapia. ¿Podrías explicar en qué consiste y cómo la aplicas en tus tratamientos para mejorar la calidad de vida de tus pacientes?

Explicado de una manera sencilla, a todos nos resulta fácil identificar que los músculos, huesos, ligamentos y demás tienen una función importante en el movimiento. Pero sin el sistema nervioso en correcto estado, nada funciona correctamente apareciendo dolor, debilidad o limitación de los movimientos. Las técnicas neurodinámicas permiten facilitar el correcto estado de cada nervio. Permíten abordar determinados tipos de dolor, debilidad o alteraciones del funcionamiento de algunas estructuras como los músculos. Hay mucha ciencia detrás, pero en esencia es fisioterapia en el sistema nervioso mediante movimientos y estímulos.

Eres responsable del área de fisioterapia en Tecum Salud. ¿Qué desafíos has enfrentado en esta posición y cómo te has asegurado de mantener un enfoque innovador y efectivo en el tratamiento de los pacientes?

Mantener una escucha activa es la clave. Ningún paciente es igual. Cada persona necesita un abordaje individualizado. Además, tenemos claro que los avances de la fisioterapia deben estar a disposición de los pacientes, siempre de una manera honesta y transparente, sin artificios. Tecum significa “contigo”. Y es lo que hacemos desde el primer momento. Estamos con el paciente, porque nos importa y nos comprometemos con cada paciente a buscar el mejor resultado posible.

Es por ello que además nos esforzamos por mantener nuestros conocimientos y habilidades al día. Para ello participamos en múltiples congresos, jornadas, y formaciones que nos permiten ofrecerle a nuestros pacientes justamente lo que necesitan.

Teniendo baja visión, ¿cómo ha influido esta experiencia personal en tu enfoque hacia la fisioterapia y en la manera en que te comunicas y conectas con tus pacientes?

Cuando yo comencé a estudiar fisioterapia, ya tenía algunos problemas de visión pero me formé como el resto de mis compañeros. Cuando perdí prácticamente la visión, hace casi 20 años, tuve que aprender una manera nueva de hacer lo que mejor sé hacer. Mis manos están muy entrenadas para sentir. Pero sobre todo, algo que en mi opinión marca la diferencia, es aprender a escuchar más allá de lo que se ve.

Siempre les digo a mis alumnos que no dejen que los ojos los engañen. Y es que demasiadas veces he atendido a pacientes que parecían complejos y acudían desesperados tras largos tratamientos. Y en realidad, lo único que estaba faltando era mirar adecuadamente al paciente, escucharlo y explorar en la dirección correcta.

Yo no tengo razón siempre. Por eso, exploro y reviso constantemente con espíritu autocrítico todo lo que hago con cada paciente. Sólo así se puede mejorar. Y la falta de visión, tal vez me ha permitido prestar más atención a esos detalles que para otros pueden pasar inadvertidos.

Estás participando como fisioterapeuta en los Juegos Paralímpicos de Francia 2024. ¿Cómo te preparaste para este desafío, y qué significa para ti trabajar con atletas que también enfrentan barreras físicas?

He estado como fisioterapeuta de la policlínica de la villa paralímpica de París 2024. Ha sido un honor y un orgullo compartir y aprender conocimientos con muchos y muy grandes fisioterapeutas, médicos, etc… de todo el mundo. Atender a deportistas de élite requiere de una gran preparación y experiencia.

Pero si lo comparo con mi día a día tanto en mi centro como en lo que hago en otros ámbitos, tengo que reconocer que un albañil, un ingeniero informático, una maestra, o una administrativa, por poner algunos ejemplos, son también deportistas de élite en lo suyo. Tienen necesidades específicas relacionadas con su actividad habitual. Su cuerpo requiere fuerza, elasticidad, precisión … de diferente manera según su actividad.

La clave está en prestar atención a los detalles y entender qué es lo que necesita cada paciente. Atender a grandes deportistas ha sido maravilloso. Ellos tenían enfermedades, o lesiones o secuelas que condicionaban su día a día pero he podido comprobar cómo se habían adaptado resilientemente. Y donde muchos vemos barreras, ellos simplemente ven retos a superar. Siendo el reto aquello que tú o yo haríamos sin discapacidad, no la discapacidad en si misma.

En relación a tu baja visión, ¿te has encontrado con obstáculos en tu carrera debido a esta condición? Si es así, ¿cómo los has superado y qué le dirías a otras personas que enfrentan desafíos similares?

La frase “no se te nota nada” ha sido muy recurrente. Siempre hay gente con prejuicios, que realmente considero que son menos capaces que personas con necesidades especiales de cualquier tipo. En mi círculo cercano nunca me he sentido distinto, ni excluido. Cada vez la sociedad es más inclusiva. Sin embargo no todo está bien y aún queda mucho por hacer Las barreras sociales son más grandes que las barreras personales y frente a ellas queda mucho trabajo de concienciación y adecuación de espacios.

Sin embargo pese a mi escasa visión, he podido realizar cada objetivo que me he marcado, como dirigir grupos de música, iniciar mi andadura como fisioterapeuta en mi centro TECUM Salud, ser Vicepresidente del Colegio de Fisioterapeutas de Andalucía, impartir formación y participar en foros internacionales e incluso vivir la experiencia de ser fisioterapeuta en las pasadas paralimpiadas.

Como fisioterapeuta en los Juegos Paralímpicos, ¿cómo es tu día a día trabajando con atletas de élite, y cuáles son los aspectos más gratificantes y desafiantes de esta experiencia?

Dependiendo de cada deporte, hay una serie de lesiones y síntomas que son más habituales. No obstante, cada deportista es distinto y el abordaje debe ser siempre consensuado con él y con el resto del equipo multidisciplinar. Así, mantenerse actualizado tanto en patología como en técnicas y tratamientos, es imprescindible y por supuesto el idioma, teniendo en cuenta que los idiomas oficiales de las paralimpiadas eran el francés y el inglés.

La prevención es un componente crucial de tu trabajo. ¿Qué estrategias consideras más efectivas para prevenir lesiones en atletas y en la población general, y cómo las implementas en tu práctica?

Mantener hábitos saludables de manera constante, es la clave para mejorar la salud desde la prevención. No esperar a que tu espalda te duela, sino hacer que tu espalda esté fuerte y activa, reduce el riesgo de sufrir dolor o las temidas ciáticas. Una postura dinámica, es decir, cambiar de postura constantemente, hábitos de higiene del sueño adecuado, hidratación y alimentación correcta.

Y de cara al puesto de trabajo o al deporte, también y con más atención a las zonas que ponemos en tensión en ese deporte o ese trabajo. Estos sólo son algunos ejemplos pero recomendaría acudir al fisioterapeuta para un chequeo periódico, como hacemos con el dentista o el ginecólogo.

La fisioterapia es un campo en constante evolución. ¿Cómo te mantienes al día con los avances en tu área y de qué manera integras nuevas técnicas y conocimientos en tu trabajo diario?

Cada paciente es un reto, por lo que estudiar cada caso en profundidad me lleva a revisar bibliografía, artículos científicos, a consultar a otros especialistas. Y fruto de todo ese proceso, con frecuencia acudo a jornadas, formaciones y congresos en los que compartir y adquirir más y mejores conocimientos sobre la fisioterapia. Además escucho algún podcast especializado y sigo a fisioterapeutas referentes a nivel internacional a través de las redes sociales.

¿Hay algún caso o paciente en particular que haya marcado tu carrera de manera significativa, y cómo esa experiencia ha influido en tu enfoque terapéutico?

Ha habido muchos pacientes que han marcado mi vida profesional e incluso personal porque cada uno te marca para siempre. He tenido casos en los que hemos peleado hasta el final por tener calidad de vida hasta el último suspiro. También he tenido la suerte de compartir los primeros pasos de pacientes que jamás pensaban que volverían a caminar.

He atendido a varias generaciones de una misma familia. Algunas veces no se ha podido hacer nada, la mayoría ha conseguido avanzar. Algunos poco, otros hasta la recuperación total. He llorado, reído, y sobre todo he aprendido mucho con cada paciente y los que me quedan. Muchos de ellos, se convierten en amigos y confidentes. Así cada persona que he atendido es como un pequeño tatuaje que me acompaña ayudándome a mejorar cada día.

Finalmente, ¿cuál es tu visión a futuro para tu carrera y para el campo de la fisioterapia en general? ¿Qué cambios o innovaciones esperas ver en los próximos años?

La fisioterapia es la profesión sanitaria que más ha avanzado en sus conocimientos y capacidades en los últimos 40 años. Y tras la cuarta revolución industrial en la que estamos envueltos con el desarrollo de la inteligencia artificial y los avances tecnológicos, la valoración del paciente así como la detección de posibilidades de mejoras constantes, será cada vez mayor.

Así, en lo personal, seguiremos enfocados en mantener los últimos avances al servicio de la población, la mejor tecnología, pero sobre todo, algo que es insustituible: el humanismo para atender a cada persona tal y como necesita, con la escucha activa, y la honestidad en cada gesto como fisioterapeuta.

¿Dónde podemos contactar con Miguel Gil?

Instagram de Miguel Gil y de su clínica: @mgilsanc_fisio y @tecumsalud.

Tik-Tok: mgilsanc_fisio.

Linked-in de Miguel Gil.

Tecum Salud se encuentra en Plaza Andalucía en Coín, Málaga.

Miguel Gil nos desvela algunos detalles más de su paso por los Juegos Paralímpicos de París 2024

He sido el único sanitario con discapacidad tanto en las olimpiadas como en los juegos paralímpicos. He estado en la Policlínica de la Villa Olímpica donde se ha atendido a pacientes de todos los países, de todas las federaciones y delegaciones.

Y por mis manos han pasado muchos de los deportistas que luego han sido medallas, tanto de oro, como de plata y bronce.

Allí estábamos un equipo de casi 20 fisioterapeutas en cada turno, desde las 7 de la mañana hasta las 23:15. Con todos los medios posibles, con toda la maquinaria y sobre todo con el mejor hacer.

De casi 30 mil fisioterapeutas de todo el mundo, de España hemos ido 80, yo he sido uno de ellos, una suerte estar allí.