¿Alguna vez te has preguntado qué río pasa por Málaga? El Guadalmedina tiene una rica historia y un papel crucial en la vida de la ciudad. A lo largo de su recorrido, el Guadalmedina ha enfrentado diversos desafíos ambientales y urbanísticos. Su importancia se refleja en la biodiversidad que alberga y en las obras hidráulicas construidas a lo largo del tiempo.
Historia del Río Guadalmedina
El río Guadalmedina ha sido testigo del desarrollo humano en Málaga desde tiempos antiguos. Su historia está marcada por una serie de eventos que han moldeado tanto el entorno natural como la vida de sus habitantes.
Orígenes y desarrollo temprano
El Guadalmedina tiene su origen en la Sierra de Camarolos, donde nace en un entorno montañoso a una altitud notable. Su cauce ha sido fundamental para las comunidades a lo largo de la historia. Desde la época romana, el río ha sido un recurso valioso, no solo para el abastecimiento de agua, sino también para el riego de tierras agrícolas.
Con el paso del tiempo, el río fue testigo de la expansión de la ciudad de Málaga, que creció a su alrededor. La llegada de diferentes civilizaciones, desde fenicios hasta musulmanes, dejó huella en sus riberas y en el uso del agua. Durante la época musulmana, la gestión de sus aguas se perfeccionó, convirtiéndose en un eje crucial para la agricultura y la economía local.
Impacto de las inundaciones históricas
Las inundaciones han marcado profundamente la historia del Guadalmedina, ocasionando tanto desgracias como la necesidad de innovar en su gestión. Desde el siglo XVI, las riadas se convirtieron en un fenómeno común, generando una serie de desafíos para la población.
Riadas entre los siglos XVI y XX
Las evidencias históricas muestran que, entre los siglos XVI y XX, el Guadalmedina experimentó un aumento significativo en la frecuencia y la gravedad de sus desbordamientos. Durante estos siglos, las riadas causaron pérdidas materiales y humanas considerables. Muchos de los relatos de inundaciones devastadoras reflejan una lucha constante entre la comunidad y la naturaleza. Las tierras adyacentes, importantes para la agricultura, se veían inundadas, destruyendo cultivos y hogares.
La Gran Riada de 1907
Uno de los eventos más catastróficos fue la gran riada de 1907, que dejó una profunda huella en la memoria de la ciudad. Esta inundación, que ocurrió el 23 de septiembre, resultó en una tragedia generalizada, provocando la muerte de muchas personas y causando daños estructurales en la ciudad.
Posteriormente, se tomaron medidas drásticas, como la construcción de la presa del Agujero, que buscaba mitigar el impacto de futuras inundaciones. La riada de 1907 evidenció la necesidad de un enfoque más estructurado en la gestión del cauce del río y su entorno.
Efectos de la Deforestación desde el Siglo XVI
La deforestación ha sido otro factor clave que ha influido en la historia del Guadalmedina. Desde el siglo XVI, la expansión agrícola llevó a la explotación intensiva de los bosques circundantes. Este proceso tuvo repercusiones significativas en el ecosistema del río.
A medida que se talaban árboles y se transformaban los terrenos en cultivos, la pérdida de vegetación natural condujo a la erosión del suelo. Esta erosión resultó en un aumento de sedimentos en el río, lo que afecta su caudal y la salud general del ecosistema.
Además, la deforestación alteró los patrones de escorrentía, exacerbando el riesgo de inundaciones. Las comunidades aledañas al Guadalmedina tuvieron que enfrentar los retos de un entorno degradado, lo que afectó su calidad de vida y su relación con el río.
Características generales del Guadalmedina
El río Guadalmedina es un elemento vital del paisaje malagueño, tanto desde el punto de vista ecológico como cultural. Su curso y biodiversidad lo convierten en un recurso esencial para la región y su historia.
Nacimiento y recorrido del río que pasa por Málaga
Punto de origen en la Sierra de Camarolos
El Guadalmedina nace en el pico de la Cruz, situado en la Sierra de Camarolos. Esta sierra, parte del sistema montañoso que rodea Málaga, se eleva a 1,433 metros sobre el nivel del mar. Desde su manantial, el río inicia su trayecto, fluyendo hacia el sur.
Longitud y trayectoria hasta Málaga
Con una longitud aproximada de 47 kilómetros, el Guadalmedina recorre un paisaje diverso antes de desembocar en el corazón de Málaga. Durante su camino, atraviesa el Parque Natural de los Montes de Málaga, ofreciendo un hábitat rico en biodiversidad. Tras su recorrido, el río se une al mar Mediterráneo, dejando tras de sí un legado histórico y cultural que ha acompañado a la ciudad a lo largo de los siglos.
Biodiversidad del río
La biodiversidad del Guadalmedina es notable, tanto en su flora como en su fauna. Este ecosistema acuático alberga diversas especies que habitan en sus riberas y aguas, contribuyendo a la riqueza natural de la región.
Flora del Guadalmedina
Las riberas del Guadalmedina están adornadas por una variedad de vegetación autóctona. A lo largo de su curso, se pueden encontrar agrupaciones de álamos y fresnos, que ofrecen sombra y refugio a muchas especies. También crecen cañas (Arundo donax) y adelfas (Nerium oleander), plantas que son resistentes y se adaptan bien a las condiciones del entorno fluvial. Esta flora no solo embellece el paisaje, sino que también juega un papel crucial en la preservación del ecosistema.
Fauna del Guadalmedina
El río actúa como un hábitat valioso para diversas especies de fauna. Entre las aves, se pueden observar diferentes tipos de pájaros que anidan en sus orillas, así como pequeños mamíferos que encuentran refugio en la vegetación circundante. En las aguas del Guadalmedina, también habitan seres acuáticos protegidos, como el galápago leproso y la lenteja de agua, que son testamento de la importancia ecológica del río. La variedad de vida que alberga convierte al Guadalmedina en un lugar de interés tanto para investigadores como para amantes de la naturaleza.
La presa del Agujero y otras obras hidráulicas
La Presa del Agujero y las obras hidráulicas relacionadas han sido fundamentales para el control del caudal del río Guadalmedina y la prevención de inundaciones en la ciudad de Málaga. Estos proyectos han buscado equilibrar las necesidades urbanísticas con las características ecológicas del entorno.
Construcción y función de la presa del Agujero
La construcción de la Presa del Agujero se llevó a cabo tras décadas de inundaciones que asolaron la ciudad. La finalidad principal de esta obra era regular el caudal del Guadalmedina, mitigando los efectos de las riadas que solían producirse, especialmente en otoño.
Diseño y capacidad de la presa
El diseño de la presa fue concebido para embalsar grandes cantidades de agua, con una capacidad aproximada de 4.5 hectómetros cúbicos. Este diseño permitió establecer un control más eficaz sobre los flujos del río, asegurando que las aguas pudieran ser gestionadas adecuadamente durante los períodos de lluvias intensas. El ingeniero Manuel Jiménez Lombardo fue clave en este proyecto, y la obra se finalizó en 1908.
Papel en la regulación del caudal
La Presa del Agujero ha tenido un papel crucial en la regulación del caudal del Guadalmedina, especialmente durante las temporadas de lluvia. Gracias a su capacidad de embalse, se ha logrado evitar la saturación del cauce y el desbordamiento del río. Sin embargo, no ha sido una solución infalible, y los estudios hidrológicos han indicado que su efectividad puede verse comprometida bajo condiciones climáticas extremas.
El Embalse del Limonero
El Embalse del Limonero fue construido posteriormente para complementar las funciones de la Presa del Agujero. Esta obra ha sido fundamental para la gestión de las aguas del Guadalmedina y la reducción del riesgo de inundaciones en la ciudad.
Construcción y propósito
Inaugurado en 1983, el Embalse del Limonero se ha diseñado para almacenar agua y regular el flujo del Guadalmedina en épocas de gran afluencia. Este embalse no solo ayuda a controlar las inundaciones, sino que también contribuye al abastecimiento hídrico de la región, especialmente durante los meses más secos del año.
Impacto en la mitigación de inundaciones
Desde su construcción, el Embalse del Limonero ha demostrado ser un recurso valioso en la lucha contra las inundaciones. La combinación de ambas infraestructuras, la Presa del Agujero y el Embalse del Limonero, ha mejorado notablemente la capacidad de Málaga para manejar las grandes cantidades de agua que se producen tras episodios de lluvias intensas. Esto ha reducido las pérdidas materiales y humanas en la ciudad, un objetivo crucial para asegurar la protección de los ciudadanos y su patrimonio.
Restauración ecológica y forestal
La restauración ecológica y forestal en la cuenca del río Guadalmedina ha sido una prioridad para mejorar la salud del ecosistema y mitigar los efectos de la urbanización y la deforestación. Estas iniciativas buscan recuperar áreas degradadas y promover la biodiversidad local.
Repoblación forestal en los Montes de Málaga
La repoblación forestal en la región ha tomado impulso a través de diferentes proyectos. Se han ejecutado acciones en ambas márgenes del río Guadalmedina, orientadas a recuperar la vegetación autóctona y fortalecer el entorno natural.
Expropiación y plantación en la margen izquierda
La margen izquierda del río fue objeto de expropiaciones en un esfuerzo por permitir la reforestación. Se han realizado plantaciones de especies autóctonas como el pino piñonero y el pino carrasco, los cuales son cruciales para la biodiversidad local. Estas acciones han resultado en una mejor retención del suelo y una prevención de la erosión que afecta al cauce del río.
Repoblación en la margen derecha
Simultáneamente, se llevaron a cabo esfuerzos de repoblación en la margen derecha. Aquí, también se han sembrado plantas que son características del entorno mediterráneo, contribuyendo a la creación de un hábitat más saludable para la fauna y la flora. La integración de estas áreas verdes con espacios urbanos busca fomentar la biodiversidad y mejorar la calidad del aire en Málaga.
Impacto de las medidas de restauración
Las medidas de restauración han generado resultados significativos en el ecosistema del río Guadalmedina. A través de proyectos de reforestación, se han observados avances en la calidad del suelo y la biodiversidad en la región.
Reducción de la erosión del suelo
Una de las consecuencias más notables de la restauración ha sido la reducción de la erosión del suelo. Las nuevas plantaciones han ayudado a estabilizar las laderas, mitigando el impacto de las lluvias intensas en el caudal del río. Esto es crucial para prevenir futuras inundaciones y proteger las comunidades cercanas.
Mejoras en la biodiversidad local
La creación de nuevos hábitats ha beneficiado a diversas especies de flora y fauna. La actividad de restauración ha repoblado la zona con vegetación nativa, ofreciendo refugio y alimento a muchas especies animales. Esto no solo proporciona un impacto positivo en la biodiversidad regional, sino que también contribuye a aumentar el interés turístico en la zona, destacando la conexión entre la naturaleza y la comunidad local.
El Guadalmedina en la actualidad
El Guadalmedina, en la actualidad, enfrenta diversos retos que afectan su salud ecológica y su relación con la ciudad de Málaga. Esto ha llevado a la implementación de diferentes iniciativas para su conservación y mejora. A continuación se presentan los aspectos más relevantes relacionados con su estado actual.
Estado de salud ecológica
El estado de salud ecológica del Guadalmedina es preocupante. La urbanización desmedida ha transformado gran parte de su entorno, provocando la degradación de este importante ecosistema. La contaminación y la falta de cuidados adecuados han impactado negativamente tanto su calidad de agua como la biodiversidad que alberga.
Problemas de urbanización y contaminación
La expansión urbana ha llevado a la invasión de áreas ribereñas por edificaciones y actividades industriales. Esto ha resultado en:
- La pérdida de hábitats naturales, afectando especies locales.
- La acumulación de residuos, incluyendo plásticos y otros contaminantes que alteran el ecosistema acuático.
- El aumento de escorrentías contaminadas que desembocan en el río, perjudicando su calidad y poniendo en riesgo la fauna que habita en él.
Estos problemas requieren atención urgente para revertir los efectos ya visibles en la salud del río y su entorno ambiental.
Campañas de limpieza y conservación
Conscientes del estado del Guadalmedina, diversas organizaciones y grupos de voluntarios han comenzado a implementar campañas de limpieza. Estas iniciativas buscan, entre otros objetivos:
- Eliminar la basura acumulada en las riberas y en el cauce del río.
- Concienciar a la población sobre la importancia de cuidar el ecosistema fluvial.
- Proponer medidas de conservación que incluyan la educación y la participación comunitaria.
A través de la colaboración entre entidades públicas y privadas, se busca restaurar y preservar este recurso natural vital para Málaga.
Proyectos recientes y futuro
Recientemente, se han llevado a cabo varios proyectos que intentan revitalizar el Guadalmedina, haciéndolo más accesible y visible para los ciudadanos. La idea es equilibrar la urbanización con la necesidad de espacios naturales.
Paseos fluviales y espacios recreativos
Se están creando paseos fluviales a lo largo del río, con el objetivo de:
- Mejorar el acceso al río y fomentar su uso recreativo.
- Permitir a los ciudadanos disfrutar de un entorno natural mientras se promueve la conservación.
- Integrar áreas verdes dentro del entorno urbano, contribuyendo a la mejora del bienestar comunitario.
Estos desarrollos no solo benefician al medio ambiente, sino que también enriquecen la calidad de vida de los malagueños.
Debate sobre el embovedado del río
Uno de los temas controversiales en la gestión del Guadalmedina es el embovedado del río. Este debate incluye opiniones tanto a favor como en contra, destacando los siguientes puntos:
- Los defensores del embovedado argumentan que podría disminuir la congestión urbana, facilitando la limpieza del cauce.
- Por otro lado, críticos advierten que esta práctica podría disminuir la biodiversidad y afectar negativamente el ecosistema natural.
La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga están realizando análisis y postulando opciones que no comprometan el futuro ecológico del río, buscando un equilibrio entre necesidad urbana y preservación ambiental.
Importancia cultural y ecológica del Guadalmedina
El río Guadalmedina tiene un papel crucial tanto en la cultura como en el ecosistema local. Su historia y las interacciones con la comunidad resaltan su relevancia en Málaga a lo largo de los siglos.
Papel en la historia de Málaga
Desde tiempos antiguos, el Guadalmedina ha sido un elemento central en la historia de Málaga. Su flujo ha proporcionado recursos hídricos esenciales para la agricultura, favoreciendo el desarrollo de asentamientos humanos. Con el paso de los siglos, el río ha sido testigo de eventos significativos que han moldeado la vida cultural y social de la ciudad.
El río también ha servido como vía de comunicación y transporte, facilitando el intercambio comercial. Las civilizaciones que habitaron la región, incluidos los fenicios y los árabes, aprovecharon el Guadalmedina, integrando su uso en sus tradiciones y modos de vida.
Además, ha sido una fuente de inspiración en el arte y la literatura, siendo representado en diversas obras que reflejan la relación entre los habitantes de Málaga y su entorno natural. Este vínculo ha dejado su huella en la identidad cultural de la ciudad.
Conexión con la comunidad local
El Guadalmedina también establece una fuerte conexión entre la comunidad y la naturaleza. A lo largo de los años, sus orillas han sido lugares de encuentro, recreo y actividades sociales. Familias y grupos comunitarios utilizan el espacio para disfrutar del aire libre, realizar deportes y eventos culturales.
Las iniciativas recientes para revitalizar el entorno del río han traído a la vista la importancia de proteger este recurso. La organización de actividades como jornadas de limpieza, talleres educativos y visitas guiadas han fomentado un mayor aprecio por el Guadalmedina y su biodiversidad.
La comunidad local se ha involucrado en la conservación del río, reconociendo su riqueza ecológica y cultural. Programas de sensibilización han surgido para transmitir a las nuevas generaciones la necesidad de cuidar este patrimonio, asegurando que el Guadalmedina siga siendo un elemento vital para Málaga.
- Resaltar la importancia del agua para el bienestar comunitario.
- Fomentar la educación ambiental y la participación popular.
- Mantener actividades que promuevan el uso sostenible del entorno natural.
Implicaciones para el clima y el medio ambiente
Las implicaciones del río Guadalmedina sobre el clima y el medio ambiente son significativas. Su existencia y el entorno que lo rodea están profundamente conectados con el clima mediterráneo de la región y afectan la biodiversidad en el Parque Natural de los Montes de Málaga.
Influencia del clima mediterráneo
El clima mediterráneo se caracteriza por veranos cálidos y secos e inviernos suaves y lluviosos. Esta variabilidad climática tiene un impacto directo sobre el flujo y la calidad del agua en el río Guadalmedina. Los períodos de sequía, que son frecuentes en los meses de verano, pueden reducir considerablemente el caudal del río, afectando a los ecosistemas que dependen de él.
La escasez de agua puede perjudicar tanto a la fauna como a la flora ribereña, limitando el crecimiento de especies vegetales adaptadas a ambientes húmedos. Por otro lado, las lluvias intensas de los meses de otoño y primavera pueden provocar riadas, contribuyendo a la erosión de las riberas y a la degradación del paisaje natural.
Este sistema fluvial también actúa como un regulador natural del clima local. La vegetación en sus riberas ayuda a mantener la humedad del suelo y a moderar las temperaturas extremas. Así, es fundamental preservar este entorno para mitigar el efecto de las olas de calor y asegurar la estabilidad climática de la zona.
Impacto en el Parque Natural de los Montes de Málaga
El Parque Natural de los Montes de Málaga abarca una rica biodiversidad, y el río Guadalmedina es un componente esencial de este ecosistema. El agua del río sostiene hábitats que albergan numerosas especies de flora y fauna, muchas de las cuales son endémicas de la región. La calidad y cantidad del agua del Guadalmedina influyen directamente en el funcionamiento de estos ecosistemas.
Entre las especies de flora, se encuentran árboles como los alamos y fresnos, que a su vez sirven de refugio para distintas aves y mamíferos. La presencia del río propicia un microclima favorable para la vida silvestre, fomentando la diversidad biológica.
Sin embargo, la urbanización y la contaminación han comenzado a afectar el equilibrio natural de esta área. El flujo de residuos y la deforestación en las riberas del río generan un impacto negativo en la calidad del agua, comprometiendo las poblaciones de fauna acuática y degradando los hábitats naturales.
La conservación del Parque Natural es, por tanto, crucial. Existen iniciativas centradas en la protección de las áreas ribereñas, buscando restaurar la vegetación autóctona y mejorar la calidad del agua. Estos esfuerzos son esenciales para garantizar que la biodiversidad se mantenga y se fortalezca en el futuro.
Infraestructura y desarrollos urbanos
La infraestructura y los desarrollos urbanos en Málaga han evolucionado a lo largo de los años, influenciados significativamente por la presencia del río Guadalmedina. Este desarrollo ha sido crucial para la conectividad y el crecimiento de la ciudad.
La Autovía A-45 y el cauce del río
La Autovía A-45 es una de las principales vías de acceso a Málaga, conectando la ciudad con otras localidades importantes de la región. Este elemento de infraestructura ha sido diseñado para facilitar el tráfico y mejorar la movilidad para los residentes y visitantes. Sin embargo, la construcción de la autovía ha implicado también consideraciones sobre el cauce del Guadalmedina.
Durante la planificación y ejecución de la A-45, se tuvo que contemplar el impacto que la infraestructura tendría sobre el río. La autovía pasa cerca del cauce, lo que ha llevado a realizar estudios para garantizar que el flujo del agua no se vea obstruido y que las características ecológicas del entorno se mantengan. La necesidad de desvíos y canalizaciones ha sido un tema de discusión, buscando siempre preservar la integridad del ecosistema ribereño.
Integración del río en la ciudad de Málaga
La integración del río Guadalmedina en el paisaje urbano de Málaga es un aspecto fundamental del desarrollo de la ciudad. A lo largo de los años, se ha trabajado en la creación de espacios que permitan la interacción de los ciudadanos con el río, convirtiéndolo en un punto de referencia y recreo.
Los proyectos para fomentar esta integración incluyen:
- Creación de paseos peatonales a lo largo de las riberas del río, que ofrecen áreas para caminar, correr y disfrutar del entorno natural.
- Desarrollo de parques y zonas verdes que favorecen la biodiversidad y permiten a los ciudadanos disfrutar de actividades al aire libre.
- Instalación de puentes y pasarelas que mejoran la accesibilidad, conectando diferentes partes de la ciudad con el cauce del Guadalmedina.
Estas iniciativas no solo buscan embellecer el entorno urbano, sino también generar conciencia sobre la importancia del río y su ecosistema. Sin embargo, el proceso no ha estado exento de controversias. Existen opiniones dispares sobre la gestión del cauce y las prácticas que deben implementarse para proteger su integridad ecológica.
El cuidado y gestión del río Guadalmedina es una responsabilidad compartida entre distintas administraciones. En este contexto, la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga desempeñan roles fundamentales para la conservación y recuperación de este importante recurso hídrico.
Rol de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga
Iniciativas de la Junta de Andalucía
La Junta de Andalucía ha implementado diversas iniciativas enfocadas en la protección y restauración del río Guadalmedina. Entre estas iniciativas se incluyen:
- Desarrollo de planes de gestión sostenible que buscan equilibrar el crecimiento urbano con la conservación del entorno natural.
- Evaluaciones ambientales para identificar los puntos críticos de contaminación y degradación del ecosistema fluvial.
- Implementación de programas de restauración ecológica que promueven la repoblación de flora autóctona en las riberas del río.
- Colaboración con organizaciones y grupos ecologistas en proyectos de limpieza y sensibilización sobre la importancia del río.
- Financiación de estudios sobre la biodiversidad del Guadalmedina, evaluando su estado de salud y las necesidades de conservación.
El Papel del Ayuntamiento en la gestión del río
El Ayuntamiento de Málaga también desempeña un papel crucial en la gestión y recuperación del Guadalmedina. Sus acciones son esenciales para la mejora de la calidad del agua y el mantenimiento de su biodiversidad. Las principales acciones incluyen:
- Desarrollo de infraestructuras que fomenten el acceso a las riberas del río, como paseos fluviales y áreas recreativas para los ciudadanos.
- Promoción de campañas educativas orientadas a la ciudadanía, enfocándose en la conservación del entorno natural del Guadalmedina.
- Colaboración con la Junta de Andalucía en proyectos de mejora de la calidad del agua, efectuando controles regulares que aseguren la salud del río.
- Impulso de normativas para la regulación de actividades industriales y urbanísticas que puedan afectar negativamente el ecosistema del río.
- Aplicación de medidas de control de la contaminación, impulsando la limpieza de vertidos y residuos en sus cauces.
Actividades Recreativas y Turismo
La cuenca del Río Guadalmedina ofrece una variedad de actividades recreativas y oportunidades para el turismo. Su entorno natural, combinado con la rica historia de la región, proporciona un espacio ideal para el ocio y la educación ambiental.
Rutas y senderismo en la cuenca del Guadalmedina
Los entornos naturales que rodean al Guadalmedina son ideales para disfrutar de rutas y senderos que permiten explorar la belleza del paisaje. Estas rutas son aptas para distintos niveles de dificultad, lo que las hace accesibles tanto para expertos como para principiantes.
- Senderos Naturales: Existen múltiples senderos que recorren las riberas del río, así como los montes circundantes. A través de estas rutas, los visitantes pueden observar la fauna y flora locales, incluyendo especies protegidas. Las rutas más destacadas incluyen:
- Ruta del Guadalmedina: un recorrido que sigue el cauce del río, perfecto para paseos tranquillos y observación de aves.
- Sendero del Parque Natural de los Montes de Málaga: una opción más exigente, ideal para los amantes del senderismo en un entorno montañoso.
- Actividades al Aire Libre: El río y sus alrededores son propicios para diversas actividades como:
- Caminatas: ideales para disfrutar de la naturaleza y desconectar del bullicio urbano.
- Ciclismo: varios tramos permiten el uso de bicicletas, proporcionando una forma activa de explorar la región.
- Paseos en kayak: en ciertas áreas se organizan rutas en kayak para conocer el río desde una perspectiva diferente.
Proyectos educativos y de sensibilización
Los proyectos educativos en la zona buscan fomentar el conocimiento y la sensibilización sobre la importancia ecológica del Guadalmedina. Estas iniciativas incluyen actividades para escolares y grupos comunitarios que desean aprender sobre el medio ambiente.
- Talleres y Charlas Ambientales: A lo largo del año, diversas instituciones organizan talleres y charlas sobre la biodiversidad del río y su entorno. Estas actividades están diseñadas para todas las edades, promoviendo la educación ambiental desde pequeños.
- Visitas Guiadas: Las visitas guiadas ofrecen a los participantes la oportunidad de explorar el ecosistema del Guadalmedina, con guías especializados que explican la historia natural y cultural de la región. Estas experiencias son muy valoradas por quienes buscan profundizar en sus conocimientos sobre el entorno.
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