“Qué es ecológico“, en alimentación se refiere a prácticas de producción agrícola donde prima la sostenibilidad ambiental, social y económica. El cultivo ecológico está regulado por normativas específicas a nivel europeo.
La agricultura ecológica se basa en el uso de métodos de producción sostenibles que fomentan la aplicación de medidas agronómicas para mantener la fertilidad del suelo, adoptando la tecnología con el menor impacto ambiental posible.
Esto significa usar principalmente abonos orgánicos, reduciendo el uso de pesticidas o plaguicidas y velando por el bienestar animal.
Diferencias entre ecológico, biológico y orgánico
Aunque los términos ecológico, biológico y orgánico se usan a menudo como sinónimos, hay algunas diferencias clave entre ellos.
En primer lugar, hay que decir que un producto siempre puede ser clasificado como orgánico, ya que la forma más antigua de cultivo sostenible es el orgánico. Por lo tanto, se cumple la normativa sobre productos orgánicos europeos, aunque el producto no esté certificado biológico o ecológico.
El término “biológico” está relacionado con la producción de alimentos que están libres de organismos transgénicos (OGM) y sin ningún tipo de modificación genética. Por lo tanto, los productos biológicos están relacionados con los métodos de producción orgánica y también suelen cumplir con la normativa ecológica.
Sin embargo, hay productos que tienen certificación orgánica y no biológica. Por ejemplo, los productos orgánicos pueden contener algunos ingredientes sintéticos, como ciertos abonos, herbicidas, productos fitosanitarios y animalizantes.
Por lo tanto, un producto ecológico siempre se refiere a un producto orgánico certificado sin modificación genética (OGM). Los productos ecológicos tienen un estricto control de calidad, desde la producción de alimentos hasta su etiquetado y comercialización. Se requiere que los agricultores/as que producen alimentos ecológicos cumplan con estándares estrictos para garantizar la calidad y sostenibilidad de los productos.
Diferencias con el cultivo tradicional
El cultivo tradicional se refiere a la práctica agrícola convencional, que se caracteriza por el uso de pesticidas, herbicidas, productos fitosanitarios, abonos minerales y organismos transgénicos (OGM). A diferencia de la agricultura ecológica, estas prácticas pueden provocar un impacto más grande en el medio ambiente, ya sea dañando el suelo o contaminando el aire y el agua.
En conclusión, podemos decir que el término “ecológico” se refiere a un método sostenible de producción orgánica que evita el uso de productos químicos, organismos modificados genéticamente y productos fitosanitarios y herbicidas, así como a la conservación de la fertilidad del suelo y la sostenibilidad económica.
Esta es la principal diferencia con el cultivo tradicional, que usa cantidades mucho mayores de productos químicos para aumentar la producción agrícola. Al elegir productos ecológicos, ayudamos a garantizar que estemos consumiendo alimentos de una fuente sostenible, segura y saludable.
Comentarios recientes